viernes, 14 de noviembre de 2008

PREJUICIOS

Una de las mayores sandeces que he venido escuchando a lo largo de los últimos años con respecto a Joan Manuel Serrat es que sus trabajos postreros no son tan buenos como los de antaño. El problema no reside en semejante criterio, el cual me parece muy respetable. El quid de la cuestión radica en que, generalmente, tales afirmaciones son proferidas por individuos que ni siquiera se han tomado la molestia de escuchar dichas grabaciones o, a lo sumo, han oído (más que haber escuchado) alguna de las canciones promocionales que acostumbran a sonar por la radio. Poco importa que (2006) –por mentar la más reciente entrega discográfica de El noi del Poble-sec- sea, cuanto menos para mí, una obra excepcional. No es necesario, al parecer, tener conocimiento alguno de causa para aventurarse, alegremente, a emitir un dictamen.

Otro tanto ocurre con Manolo García. Diversas personas me han comentado que les gustaba más con El Último de la fila. De nuevo lo esencial del asunto no se halla en el parecer (insisto en la idea de que toda opinión me merece, de entrada, la mayor de las consideraciones), pese a que, a mi modo de ver, ninguno de los trabajos del popular grupo barcelonés puede equipararse, ni por asomo, a la trayectoria en solitario del cantante, de abrumadora riqueza lírica. La cosa es que una ingente cantidad de aquéllos que expresan ese convencimiento desconocen, prácticamente por completo, la propuesta individual del autor de Para que no se duerman mis sentidos.

Hay quiénes, incluso, se pronuncian sobre una película sin haberla visto, basándose únicamente en lo escuchado o leído, cuando no en un mero eslogan comercial. Crasa necedad.

No pretendo sentar cátedra ni situarme por encima de nadie. Quede claro que a menudo yo mismo enjuicio toda suerte de personas y cosas sobre las que, de ser honesto, no poseo apenas noción alguna. Tan sólo trato, pues, de poner en evidencia una conducta que, amén de irracional, estimo altamente deplorable.

Feliz finde a todos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

irracional y peligrosa, mi querido amigo, peto tu, yo y mucha + gente sabemos que no es verdad.Besitos